Una vez que tenemos claro que la sexualidad no es solo un acto para procrear, ya que hemos nacido sexuados, nos percataremos que en la madurez la sexualidad se transforma en un acto con diversas tonalidades. Me atrevería a decir que el sexo puede ser en la persona madura mucho más reconfortante que en la juventud. Las hormonas hablan otro idioma y prevalecen otro tipo de sensaciones y de deseo.
- Páginas: 205
- Encuadernación: tapa blanda
- Lengua: castellano
- Isbn: 9788416321544
- Edición: 4ª
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